"Santa María de Las Condes es una parroquia preciosa, con mucha vida, que me desafía", con estas palabras, el Padre Nicolás nos transmite su sentir como párroco.
"Siento que llevo un tesoro en vasijas de barro por todo lo que significa, por la cantidad de gente que viene, por las pastorales que tenemos, por los laicos que participan en el consejo pastoral, los diáconos. Es un tesoro que hay que cuidar".
En esta misión de ser nuestro párroco el Padre Nicolás se siente animado por, "hacer presente al Señor. Uno tiene un regalo de Dios en las manos por ser sacerdote y hay que ser responsable, cuidarlo, animar en la fe. Con toda la crisis que está viviendo la Iglesia uno tiene la responsabilidad de dar y levantar los ánimos, de caminar hacia Jesucristo, de volver nuestra fe a las cosas importantes".
Agradecemos al Padre Nicolás por el servicio de acompañarnos y animarnos como comunidad que busca seguir a Jesucristo.