Ante la situación ocurrida en la fiscalización a matrimonio celebrado el día jueves 22 de abril, nuestro párroco, Padre Nicolás se refirió al finalizar la misa de ayer:
"Hoy (jueves 22 de abril) tuvimos una situación complicada aquí en la parroquia por un matrimonio.
Me gustaría decir tres cosas bien sencillas:
La primera, los que conocen esta parroquia, caben 650 personas sentadas, tenemos las bancas marcadas para que, en el caso de que se pudiera, vinieran 200 personas, con las medidas sanitarias; pero siempre hemos hecho el esfuerzo de cumplir con las exigencias sanitarias que nos pide la autoridad. Cuando viene la gente a misa en otra fase, tenemos una lista de trazabilidad, con una aplicación; aquí se le mide la temperatura, se les pasa alcohol gel para que se coloquen en las manos… en este minuto estamos el diácono, Don Roberto que nos ayuda a transmitir y el coro que ustedes escuchan está aquí en un teléfono, no hay nadie más aquí en el Templo, que cabrían 200 personas con todas las medidas. Siempre hemos hecho el esfuerzo de ser fieles a las medidas que nos van pidiendo.
En segundo lugar, en el matrimonio de hoy nunca hubo una intención de mala fe… por ahí salió que la gente salió a esconderse, eso no es verdad, habían 11 personas aquí en el Templo; una persona que estaba grabando que estaba más cerca de la puerta y el sacerdote, el aforo que entendíamos que podíamos cumplir era de 10 personas… ¿qué pasó?
Y esa es la tercera cosa, hubo un error justamente en el protocolo del arzobispado que es en el que nosotros nos regimos, donde decía que 10 personas pueden participar en el matrimonio, más el sacerdote; resulta que la autoridad había hecho una modificación en el protocolo y solo podían estar cinco. Nunca hubo una mala fe de hacer algo que no se podía; por eso pedimos todas las disculpas si hubo un malentendido, también los digo por nuestros vecinos. Nunca hubo una intención de hacer algo de mala fe, una cosa escondida que no quisiéramos hacer, siempre hemos tratado de cumplir los protocolos y así lo hacemos día a día en la celebración de la Eucaristía.
Así que los invito a que tengamos comprensión y a asumir también, las responsabilidades que tengamos que hacer".
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