Es muy importante que respetemos las normas sanitarias

Ahora que el aforo a misa presencial aumentó

Que podamos ser 100 personas reunidas en comunidad para celebrar la Eucaristía nos pone muy contentos. Queremos continuar así, por lo que te pedimos seguir las normas sanitarias.

RECUERDA SIEMPRE:

Al llegar a misa:

• El uso de mascarilla es obligatorio. 
• Aplícate alcohol gel al ingresar al templo. 
• Mantén la distancia y respeta la señalética indicada en las bancas. 

Durante la misa:

• En el saludo de la paz, solo haz un gesto, sin contacto físico. 
• En la fila para la comunión, mantén la distancia señalada en el piso. 
• En la comunión, recibe la ostia en la mano y bájate la mascarilla rápidamente para tomarla (Más abajo, en este misma nota, te contamos qué dice al respecto nuestro Santo Padre, el Papa Francisco y nuestro ex Papa Benedicto XVI). 

Al salir de misa:

• No dejes objetos en las bancas. 
• Respeta el distanciamiento de seguridad. 
• Evita aglomeraciones. 

A las personas con salud de riesgo las invitamos a seguir la misa en forma online. 

En este tiempo de pandemia, comulguemos en la mano

¿Qué dice el Papa Francisco y nuestro ex Papa Benedicto XVI acerca de comulgar con la mano?

“Según la práctica eclesial, el fiel se acerca a la Eucaristía normalmente en forma de procesión y se comulga de pie con la dedicación, o de rodillas, tal como se determina por la Conferencia Episcopal, recibiendo el Sacramento en la boca o, donde está permitido, en la mano, como se prefiere..." (Papa Francisco, Audiencia general en la Plaza de San Pedro, 21 de marzo de 2018)”.

"Nuestra discusión tiene que limitarse a aquello que ha alcanzado a hacer la Iglesia tanto antes como después del siglo IX, es decir al respeto profundo rendido al misterio de Dios al ponerse Él en nuestras manos. Y no debemos olvidar el hecho de que no solo son impuras nuestras manos, sino que también lo son nuestra lengua y nuestro corazón, y con frecuencia pecamos más con nuestra lengua que con nuestras manos. La mayor osadía, y a la vez expresión de la bondad misericordiosa de Dios, es que no solo manos y lengua, sino nuestro propio corazón puede tocarlo..." (Papa Benedicto XVI, "Gott ist uns nah").