"Señor, fortalece y anima a todos quienes sufren enfermedad, para que encuentren en Ti el consuelo y la esperanza. Y así, junto a sus seres queridos y quienes los asisten, sientan con mayor fuerza tu presencia que nunca abandona.”
Con esa oración y en comunión con la intención del Papa Francisco para febrero, la Conferencia Episcopal de Chile nos invita a unirnos por quienes sufren en cuerpo y alma.
Miremos nuestra comunidad, nuestro entorno y familia y recemos con fervor, por quienes están padeciendo alguna enfermedad para que Jesús acompañe el dolor, otorgue la esperanza y verdadera sanación.
Recuerda que como parroquia, dedicamos una Misa cada cuarto martes de cada mes por nuestros seres queridos delicados de salud.