El 14 de febrero nos reunimos en el templo para celebrar, en comunidad, la Misa de Miércoles de Ceniza. Cada uno de nosotros, recibió el signo de la cruz en su frente, comenzando nuestro camino cuaresmal de 40 días. Revisa al final de la nota las imágenes de ese día.
¿Cuál es el sentido de este tiempo litúrgico?
Su finalidad es ser un tiempo de preparación para la Pascua. Por ello se suele definir a la Cuaresma, "como camino hacia la Pascua".
El tiempo de Cuaresma, que nos prepara para celebrar la Pascua, se basa en dos pilares: la contemplación de la Pascua de Jesús y la participación personal en ella, a través de la penitencia y de la celebración o preparación de los sacramentos del Bautismo, Confirmación, Reconciliación y la Eucaristía.
Incorporarnos al "misterio pascual" de Cristo supone participar en el misterio de su muerte y resurrección. No olvidemos que el Bautismo nos configura con la muerte y resurrección del Señor. La Cuaresma busca que esa dinámica bautismal (muerte para la vida) sea vivida más profundamente. Se trata entonces de morir a nuestro pecado para resucitar con Cristo a la verdadera vida: "Yo les aseguro que si el grano de trigo, muere dará mucho fruto" (Jn 20,24). (1)
Vivamos así, este tiempo de reflexión tanto de forma personal y comunitaria, caminando juntos hacia la Pascua.
(1) Aciprensa