¡Señor, sáname de mis cegueras para testimoniar que Tú eres luz del mundo!
Este domingo es un momento privilegiado para dejar atrás
nuestras cegueras, nuestras faltas de visión del Reino de Dios. Nuestro testimonio es vital para
Jesucristo sea luz del Mundo, ¿a qué me comprometo para que esto sea una realidad?