Colaboremos con Fundación Las Rosas

Este sábado y domingo

Queremos informar a nuestra comunidad que en todas las misas de este sábado 27 y domingo 28 de mayo tendremos colecta extraordinaria de Fundación Las Rosas.

Desde ya les animamos a apoyar a esta institución católica que desde hace 50 años se dedica a la ayuda de los adultos mayores más desvalidos de Chile.

"Estamos cumpliendo 50 años de vida, un número extraordinario que da cuenta del largo camino que hemos debido recorrer para convertirnos en la institución que somos. Sabemos que todavía queda mucho por hacer, pero estamos seguros que cada día es un avance. Nuestro anhelo es trascender, llevando buen trato, cuidado, salud, cariño y espiritualidad a las personas mayores que más lo necesitan. Ese es nuestro compromiso.” señala el Padre Andrés Ariztía, Capellán Fundación Las Rosas

Orígenes Parroquiales de Fundación Las Rosas

La Fundación se gesta en la Comunidad Parroquial y diocesana. En 1967 el Arzobispo de Santiago, CardenalRaúl Silva Henríquez, le pide a Monseñor Tapia preocuparse de unos Hogares parroquiales con grandes necesidades de mantención y financiamiento. Y nace La «Fundación de ayuda fraterna»

Posteriormente Mons. Sergio Correa toma la responsabilidad de desarrollar la institución a nivel nacional iniciando estaobra que conocemos como «Fundación las Rosas de Ayuda fraterna»

Hoy son 30 Hogares a lo largo de Chile donde acogemos 2.200 ancianos ylos cuidamos con cariño, dignidad y sentido del encuentro con el Señor, experiencia entendidacomo un tesoro de misericordia para la sociedad, la vida de la Iglesia y sus Comunidades.

Agradecemos a Dios estos años por su Providencia, a las Religiosas, laicas y laicos que atienden diariamente a nuestros ancianos; también por inspirar a tantos voluntarios, amigos y personas de corazón generoso. Recordamos agradecidos la vocación de las Damas de Blanco, Servidoras de María Santísima, que están presentes entregando amor y acompañamiento espiritual a nuestros residentes y así son partícipes del llamado del Papa Francisco a preocuparnos de los adultos mayores que nuestra sociedad ha olvidado.