El Apóstol Santiago es el patrono de la ciudad de Santiago y de la Arquidiócesis. Su imagen se encuentra al interior de la Catedral Metropolitana. Igualmente, Santiago Apóstol es Patrono de otras importantes Arquidiócesis de América: Santiago de Cuba, Santiago de Caracas, en Venezuela, entre otras.
Nació en Betsaida cerca del lago de Tiberiades (Palestina), hijo de Zebedeo, hermano de Juan, fue de los primeros llamados por Jesús, junto con su hermano para integrar el grupo de los Doce.
Su nombre aparece en el Evangelio al lado de su hermano Juan. Juntos piden a Jesús los dos primeros puestos (de honor y autoridad) en su nuevo Reino; le piden también enviar el fuego del cielo sobre un pueblito de Samaría que no quieren recibirlos. Jesús les da el apodo de “Boanergues” (que significa hijos del trueno) por su carácter impetuoso.
Santo protector
Los encontramos de nuevo a los tres a la orilla del lago durante una aparición del Resucitado. Fue el primero en sufrir el martirio. Herodes Agripa lo hizo decapitar, mientras Pedro estaba encarcelado (Hech. 12,2) en la Pascual del año 44.
Desde la antigüedad está muy difundida la percepción de que Santiago había predicado el Evangelio en los confines de Occidente. Después de la invasión mahometana, el apóstol Santiago aparece venerado como Patrono de España y de sus países conquistados. Su sepulcro en Compostela, a semejanza del Sepulcro vacío del Señor en Jerusalén y de la tumba de Pedro en Roma, atrae, hasta nuestros días a innumerables peregrinos de toda la cristiandad.
Hay otro Santiago “hijo de Alfeo”, que aparece como jefe de fila del tercer grupo de Apóstoles en la lista de los Doce.
Algunos lo identifican con un tercer Santiago, “el menor”, “hermanos del Señor” (o sea primo). Aparentemente éste no forma parte de los Doce, pero ha visto al Resucitado (1Cor 15, 7). Fue un personaje importante de la Iglesia de Jerusalén, a quien Pablo encuentra varias veces. La tradición le atribuye la paternidad de una epístola canónica.
La ciudad y la Arquidiócesis de Santiago están bajo su protección. El 25 de julio es un día para nuestra ciudad y para nuestra Iglesia que camina tomada de la mano del apóstol Santiago, su protector.