A un año de asumir como encargada de prevención de abuso, en nuestra parroquia, Magdalena nos comparte cómo ha sido su experiencia en este tiempo, en donde los esfuerzos por tener ambientes sanos es un horizonte claro.
“Este año ha sido fundamentalmente de preparación, rezo y estudio sobre este encargo tan importante. Hemos tenido algunas reuniones para organizarnos acerca de cómo vamos a prevenir conductas abusivas y principalmente ofrecer ambientes sanos”.
¿Qué líneas de acción o proyectos se han trabajado en este año?
Este año fomentamos que todos los agentes pastorales hicieran los cursos de Prevención que organiza la Vicaría Cordillera. Actualmente estamos coordinando las fechas para que este segundo semestre, más personas puedan tener la oportunidad de recibir esa formación si es que lo quieren. En cuanto a la remodelación de nuestra parroquia, se han tenido presente un montón de normas de prudencia, como por ejemplo, poner más ventanas.
También se ha compartido la Carta del Papa al Pueblo de Dios que peregrina y se ha invitado al conversatorio sobre la situación de la Iglesia, a lo que se pueden sumar otras iniciativas, dice Magdalena. “No descartamos la posibilidad de tener más instancias en grupos pequeños para que todos puedan hablar. Es una excelente instancia para que la comunidad parroquial pueda ver que la Iglesia es una familia, en la que hay veces que pasan cosas buenas y otras malas, y que debemos seguir unidos rezando”.
“El Santo Padre en la carta dirigida al Pueblo de Dios que peregrina en Chile, nos dice que uno de los grandes problemas que pudo constatar fue la “falta de reconocimiento/escucha de las historias de las víctimas. Me parece bueno que nos demos cuenta de que estas situaciones por las que está pasando la Iglesia, no son indiferentes para nuestros pastores ni para los demás fieles, ya que, si la Iglesia sufre, yo también sufro. Asimismo, es importante que los fieles podamos sentir el apoyo que nos da el Espíritu Santo en estos momentos difíciles parecidos a lo que les pasó a los apóstoles antes de Pentecostés”.
En el contexto que vive la iglesia chilena, en temas de abusos ¿qué contribución puede hacer la comunidad parroquial?
En este contexto es fundamental recordar que lo más importante es Jesucristo que murió en la Cruz por amor a cada uno de nosotros, que es a Él a quien debemos seguir, luego rezar, rezar mucho por la Iglesia, por el Papa, por sus asesores, por los obispos, sacerdotes y diáconos ya que, si nosotros no los apoyamos con oración y pequeños sacrificios, la tarea se les hace más dura. Debemos recordar que todos somos parte de la Iglesia de Jesús y que es nuestra responsabilidad sacarla adelante. Además de oración debemos reparar, entre todos, “justos por pecadores” porque somos solidarios, hermanos de la misma Familia de Dios. En la Parroquia, en todas las Misas se pide constantemente por estas intensiones y además se han organizado varias Adoraciones al Santísimo en las cuales le hemos pedido perdón a Dios por nuestros pecados, acciones y omisiones y los de todos los miembros de la Iglesia.
Magdalena recalca como indispensable la buena comunicación, “que cuando veamos cosas que nos llamen la atención, las digamos a través de los distintos canales, si nos callamos nos hacemos cómplices, si hablamos, podemos prevenir grandes desastres. Nos puede servir recordar lo que el Papa en Chile dijo a los jóvenes en Maipú, que la Iglesia necesita que nosotros nos portemos como personas espiritualmente mayores de edad, con coraje para decir, esto me gusta, este camino me parece que es el que hay que hacer, esto no está bien, que nos digan lo que sienten y piensan”[i].
Si alguna persona desea contactarse con Magdalena Latorre, puede escribir a mlatorre@stm.cl
Además existe un proceso de escucha por encargo de monseñor Scicluna a algunos integrantes del Consejo nacional de prevención de abusos y acompañamiento a las víctimas. El encargo es de acoger y escuchar a aquellas personas que él no ha podido atender personalmente durante sus misiones en Chile, y que voluntariamente estén dispuestas a hacerlo.Para ello está disponible para contacto el mail: escuchar2018@gmail.com y el teléfono celular +56 9 94 95 05 19
[i]Cfr. Encuentro del Santo Padre Francisco con los jóvenes, Santuario Nacional de Maipú, 17 de enero de 2018