Alrededor de 45 personas miembros de diferentes pastorales, se dieron cita la tarde del sábado 16 de abril para participar de la asamblea de la Parroquia Santa María de las Condes.
La actividad comenzó con una Adoración al Santísimo presidida por el Padre Nicolás Achondo, en la cual, se encomendó el trabajo que se realizaría durante la tarde, para que fuera el Espíritu Santo quien reinara en las conclusiones.
Luego, los asistentes pasaron al salón parroquial en donde el Padre Nicolás compartió algunas palabras refiriéndose a su visión de la Parroquia actualmente. “Siento que tenemos un tesoro. La riqueza de todos es maravillosa. Agradezco y admiro el testimonio de fe que entregan ustedes. Pero esto se convierte en un desafío, del que tenemos que estar atentos, porque podemos apagarlo o podemos encenderlo mucho más”.
Además, el Padre Nicolás se refirió a la importancia de estar atentos a los jóvenes para que vuelvan a ser un pilar fundamental en la Parroquia, sobre todo considerando “el difícil tiempo eclesial que están viviendo. Debemos acogerlos y ser atentos con ellos”.
Sobre sus sueños para la Parroquia, nuestro párroco expresó: “Me gustaría que estuviéramos contentos. Lo peor que nos puede pasar es que seamos pesimistas, el mundo está difícil. Para los primeros cristianos tampoco fue fácil, pero es una oportunidad. Los quiero invitar a que soñemos, que estemos entusiasmados, que estemos esperanzados. San Agustín decía: ‘¿tú crees que el mundo es malo? Se tú mejor y el mundo va a cambiar’. Mostremos a un Cristo verdadero, seamos protagonistas, sin licuar la fe. Seamos una parroquia abierta, renovada, con vida. Como el boxeador, tenemos que estar siempre atentos, no bajemos las manos”.
En un segundo momento, se realizaron tres exposiciones, una al respecto de los diferentes hitos de la Iglesia de Santiago y cómo la Parroquia los ha llevado a cabo; la segunda, sobre la organización de la Parroquia; y la tercera, sobre los resultados de una encuesta que se realizó el año pasado a diferentes participantes de la Parroquia, sobre diferentes temas relacionados a la vida parroquial, que puedes conocer aquí.
A través de un trabajo personal y anónimo los participantes respondieron tres preguntas: ¿cuál es la periferia, material o existencial, que más urgentemente requiere de nuestra ayuda?; ¿en qué puedo contribuir yo a ayudar en esas periferias y ser más misericordioso? ; ¿qué me comprometo a realizar para que la pastoral y nuestra Parroquia sean más misericordiosas?
Fueron muchas las conclusiones sacadas que serán recogidas por el Párroco y los agentes pastorales, pero todas se vinculaban en la idea de que la Parroquia debía ser más inclusiva, más abierta a los que sufren, más acogedora y más misionera. Que tenía la misión de llevar a muchas personas al conocimiento real de Jesús y que para ello, necesitábamos el compromiso responsable y concreto de todos en las diferentes tareas parroquiales.
Tomás Montero forma parte de la Pastoral Juvenil y cree que los jóvenes tienen mucho que entregar. “Sueño con que podamos ser muchos más en la Pastoral y que no quedemos en la periferia. Tenemos que rezar mucho e ir buscando formar de incluir a más para crecer en número”.
Luis Vásquez, encargado de la Pastoral de Liturgia cree que el compromiso de las personas es fundamental para que la Parroquia funcione. “Hay mucha gente que quiere participar y que aparece a veces, pero no se queda. Y ahí tenemos un trabajo importante. Tenemos que encantarlos. No es una realidad fácil, pero podemos hacer que participen más”.
María Luisa Ovalle participa en la Pastoral de la Salud y tiene un sueño muy concreto para la Parroquia: “Que exista una pastoral para mujeres separadas. Una destrucción matrimonial trae muchas consecuencias para ellas y para todas sus familias y necesitan de la acogida de la Iglesia, que busquemos contenderlas, ayudarlas a vivir este proceso para que se sientan realmente acogidas”.
Finalmente al final de la misa de las 20:00 horas, el Padre Nicolás llamó a todos los agentes pastorales a realizar una serie de compromisos ante Dios para ofrecer su servicio a la Parroquia, buscando hacer la voluntad de Dios para ella.
En la Parroquia Santa María de las Condes se seguirá trabajando para discernir esa voluntad. Para que sea el Espíritu Santo el que hable mediante los que trabajan en ella y que realmente puedan encantar a muchos con el amor y la misericordia de Dios. Para ver todas las fotos haz click aquí